Contra corriente



… la corriente te arrastró y tú te dejaste ir sin brazadas de retorno, sin resistencia; abandonaste los espacios inauditos donde te encontraba, casi sin querer, y dejaste atrás la poética del umbral…

[algunas veces los cambios de ruta separan las maneras de besar y a los besos, a las fatigas sudorosas y a los cuerpos jadeantes, a los versos transgresores de sus ansiosos lectores, a las buenas y a las malas costumbres, todo lo que violenta la ética ancestral y religiosa, y los cánones precisos de aquella moralidad que se presume virtuosa, todo ello es aislado con sutileza y también por la fuerza de la omisión crónica, de la impuesta desaparición del nombre, el espíritu, y el legado que aquél haya dejado trazado, en el récord cotidiano de las grandes tribus y de los clanes…]

… al irte con el curso de la corriente repleta de ecuaciones imposibles de resolver, sin nadar en sentido contrario, ascendente y lateral, al despojarte de la luz que irradiaba tu pecho marino, y lanzar tu paño marrón, al olvidar la sensación de tus piernas temblorosas de pasión, las señas del umbral y las maneras en que fue besado tu cuerpo tulipán, húmedo, y excitado, a la hora de las transgresiones y las malas costumbres, dejaste atrás toda la belleza de ser desde la otra ruta factible de la vida…

…sólo tú podrás trazar el camino, solo tú puedes dictar el ritmo de los pasos, y reasumir el reto de enfrentar el espacio diario de la pasión a pesar de la corriente; en lugar de flotar, abre tus brazos…

[y sal a volar…]


© Eric Alvarez. Texto y Fotografía (Santurce, 2019-11-09, 5:40 pm.)

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