Ástor Piazzolla, "Dúo de Amor", inicio de la película “El exilio de Gard...

(Hay situaciones en la vida que no se pueden explicar con palabras sin cometer errores, excesos o, cabe decir, imprudencias. Suscita esta afirmación —hecha a solas o ante unos ojos que nunca se podrán olvidar— la referencia inmediata a los eventos que identificamos como la sincronía, el azar, la coincidencia, el hecho fortuito, y a los lugares imprevistos donde se producen los encuentros, se manifiestan los afectos, y estos tejen y destejen un universo en el que el amor entre dos personas "es" o "pudo ser" alguna vez.  En todo caso, sea la exquisita música de Astor Piazolla la mejor manera de hablar sobre estas cosas que solo el azar y los juegos del tiempo pueden explicar. Eric N Alvarez) 

Mar 8, 2021

Puesta en You Tube, y Sinopsis, por Laura Patroni

Con sus creaciones para “El exilio de Gardel (Tangos)”, la película dirigida por Fernando “Pino” Solanas, y estrenada en 1985, Ástor Piazzolla alcanzó uno de los puntos altos de su carrera como compositor cinematográfico, obteniendo la música del filme múltiples premios, entre otros: en Francia, el “César de Oro” a la mejor música de película y el “Premio de la Academia Francesa del Disco” al mejor filme musical del año; en Argentina, el “Cóndor de Plata” a la mejor música de película; en Cuba, el “Gran Premio” a la mejor música original en el Festival de La Habana. 

Comparto el inicio de la película, con los créditos, y de fondo el extraordinario “Dúo de Amor”, compuesto por Ástor, e interpretado por él con su quinteto. Ástor y el cine. 

Una de las vertientes artísticas de Ástor Piazzolla que no siempre se tiene presente, es su notable y prolífica relación con el cine, hecha cuerpo en la composición de bandas sonoras en nada menos que 44 películas, tanto argentinas como latinoamericanas, hispanoamericanas y europeas. A esto debe agregarse el uso fílmico que varios directores han hecho de composiciones suyas no creadas originariamente como música para un filme. 

A partir de su primer trabajo musical fílmico, con la película “Con los mismo colores”, dirigida por Carlos Torres Ríos y estrenada en 1949, Piazzolla comenzó a ocupar un espacio musical importante en el ámbito cinematográfico, y su música se convirtió en una destacada presencia emotiva en películas de los más variados estilos y directores. Así, lo encontramos aportando su talento musical en cintas de la cinematografía clásica argentina de los años 50 (“Bólidos de acero”; “El cielo en las manos”; “Stella Maris”; “Sucedió en Buenos Aires”; “Los tallos amargos”); en comedias (“Quinto año nacional”; “Las locas del conventillo”); en películas representativas de lo que se conoció en la década de los sesenta en Argentina como “Nuevo Cine” (“Prisioneros de una noche”; “Con alma y vida”); en películas de corte vanguardista (“Pulsación”, de Carlos Páez Vilaró); en películas con un fuerte compromiso político, tal el caso de “Llueve sobre Santiago”, del año 1975, que su director el chileno Helvio Soto rodó en el exilio, y que cuenta el derrocamiento del gobierno de Salvador Allende por parte del dictador Pinochet. 

Es de destacar además su premiado trabajo musical para la película brasileña “A intrusa”, de Carlos Hugo Christensen, estrenada en 1979. 

Ha sido importante su ligamen artístico con el director Fernando Ayala, creando música para siete de sus filmes, pudiendo mencionarse, además de los ya citados, “Una viuda difícil”, “Sábado a la noche, cine”, "Paula cautiva", “Con gusto a rabia” y una verdadera película de culto, “La fiaca”, estrenada en 1969. 

Cuando Ástor decide instalarse en Italia en 1974, se inicia su fuerte difusión por Europa, y en este marco comienza a crear música para películas europeas. Entre éstas, podemos citar “Lumiere”, de Jeanne Moreau, “Cadaveri eccelenti”, de Francesco Rosi; “Armaguedon”, de Alain Jessua; “Bella donna”, de Peter Keglevic, “Enrico IV”, de Marco Bellocchio. 

Ástor pone un broche de oro a su recorrido musical fílmico, a través de dos filmes de Fernando “Pino” Solanas que dejaron su marca en la cinematografía argentina: “El exilio de Gardel (Tangos)”, de 1985, y “Sur”, de 1987. Y es indudable que una parte considerable de la potencia emotiva y artística de ambos filmes, se debe a la extraordinaria presencia musical de Ástor. 

Por último, y como ya hemos dicho, directores de todo el mundo han utilizado música que Piazzolla había creado por fuera del ámbito cinematográfico. Entre tantas, podemos destacar una recordada película de ciencia ficción del año 1995, “Doce Monos”, de Terry Gilliam, en la que actuaban Bruce Willis, Brad Pitt y Christopher Plummer, y en la que se puede escuchar, a modo de leitmotiv, ya desde los créditos, y en partes importantes de su desarrollo, una versión de la “Suite Punta del Este”, que con anterioridad al filme había compuesto Ástor.

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